miércoles, 29 de julio de 2015

Es el caos


Alguien roba el celular a alguien. Corro al ladrón y le arrebato el celular. Alguien cree que el ladrón soy yo, me insulta y me arrebata el celular. El propietario, indignado, increpa al cuarto individuo creyéndolo el primer y verdadero ladrón y le quita el celular.  

La escena se repite en distintos puntos de la ciudad en simultáneo. Ahora nadie sabe quién es el ladrón y quién el robado, porque muchos son los unos y muchos los otros.

En un inicio, intenté ser amable. Ahora, puesto que mi celular ha sido arrebatado, intento apropiarme de alguno que sea de mi agrado. Ya no sé si soy el delincuente o si soy el atacado. Y es el caos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario